lunes, junio 19, 2006

Ezequiel 34


bavaro
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Dios se revela en su totalidad por medio a su palabra, muchas personas dicen “Dios es un misterio” pero aunque muchas otras cosas nos serán rebeladas el día en que lo veamos cara a cara, Él, en su infinita misericordia decidió revelarse a nosotros por medio a su palabra. Para saber como Dios se siente con respecto a algo que deseamos hacer o algo que pensamos que es su voluntad, solo debemos de acudir a su palabra (La Biblia), hay esta todo.
El 2006 ha sido un año impactante para muchos Cristianos que han decidido decirle “SI” a Dios, nuestro Padre celestial ha decidió acercar su reino a rostros y no hay quien lo detenga. También ha dejado claro que mejor le es la santidad a su pueblo, mejor es buscarle y arrepentirnos de nuestros pecados. Mejor nos es abundar en el amor que Cristo enseño y mejor nos es unirnos para por fin unidos formar el Cuerpo de Cristo.
Desde que volví a los pies Cristo, estas palabras han sido muy importantes para mí, pues me descarrié. Y aunque nadie me salio a buscar en el momento, Él si lo hizo, hasta que me atrajo a Él con lazos de amor.
De este año en adelante son tiempos para meditar en nuestras acciones y vigilar nuestros pasos. Los impíos no son los únicos que verán la ira de Dios (No acuso a nadie) pero el cuerpo de Cristo será estremecido si no se arrepiente, sino allanan la senda y barren el camino.

Ezequiel 34, habla tanto como para los Pastores que han decidido hacer de esto un negocio, como de los Siervos (Ovejas) que se enseñorean de lo que no es suyo y dejan que los frutos de la carne tomen control de ellos. Pero no hay porque temer, porque el Santo de Israel, El León de Judá será tu defensor y El mismo te pastoreara.

Ezequiel 34
Profecía contra los pastores de Israel
1 El Señor se dirigió a mí, y me dijo: 2 "Tú, hombre, habla en mi nombre contra los pastores de Israel, y diles: 'Esto dice el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se cuidan a sí mismos! Lo que deben cuidar los pastores es el rebaño. 3 Ustedes se beben la leche, se hacen vestidos con la lana y matan las ovejas más gordas, pero no cuidan el rebaño. 4 Ustedes no ayudan a las ovejas débiles, ni curan a las enfermas, ni vendan a las que tienen alguna pata rota, ni hacen volver a las que se extravían, ni buscan a las que se pierden, sino que las tratan con dureza y crueldad. 5 Mis ovejas se quedaron sin pastor y se dispersaron, y las fieras salvajes se las comieron. 6 Se dispersaron por todos los montes y cerros altos, se extraviaron por toda la tierra, y no hubo nadie que se preocupara por ellas y fuera a buscarlas.
7 'Así que, pastores, escuchen bien mis palabras. 8 Yo, el Señor, lo juro por mi vida: Fieras salvajes de todas clases han robado y devorado a mis ovejas, porque no tienen pastor. Mis pastores no van a buscar a las ovejas. Los pastores cuidan de sí mismos, pero no de mi rebaño. 9 Por eso, pastores, escuchen las palabras 10 que yo, el Señor, les dirijo: Pastores, yo me declaro su enemigo y les voy a reclamar mi rebaño; les voy a quitar el encargo de cuidarlo, para que no se sigan cuidando ustedes mismos; rescataré a mis ovejas, para que ustedes no se las sigan comiendo.'
El buen pastor
11 "Yo, el Señor, digo: Yo mismo voy a encargarme del cuidado de mi rebaño. 12 Como el pastor que se preocupa por sus ovejas cuando están dispersas, así me preocuparé yo de mis ovejas; las rescataré de los lugares por donde se dispersaron en un día oscuro y de tormenta. 13 Las sacaré de los países extranjeros, las reuniré y las llevaré a su propia tierra. Las llevaré a comer a los montes de Israel, y por los arroyos, y por todos los lugares habitados del país. 14 Las llevaré a comer los mejores pastos, en los pastizales de las altas montañas de Israel. Allí podrán descansar y comer los pastos más ricos. 15 Yo mismo seré el pastor de mis ovejas, yo mismo las llevaré a descansar. Yo, el Señor, lo afirmo. 16 Buscaré a las ovejas perdidas, traeré a las extraviadas, vendaré a las que tengan alguna pata rota, ayudaré a las débiles, y cuidaré a las gordas y fuertes. Yo las cuidaré como es debido.
17 "Yo, el Señor, digo: Escuchen, ovejas mías: Voy a hacer justicia entre los corderos y los cabritos. 18 ¿No les basta con comerse el mejor pasto, sino que tienen que pisotear el que queda? Beben el agua clara, y la demás la enturbian con las patas. 19 Y mis ovejas tienen que comer el pasto que ustedes han pisoteado y beber el agua que ustedes han enturbiado. 20 Por eso yo, el Señor, les digo: Voy a hacer justicia entre las ovejas gordas y las flacas. 21 Ustedes han alejado a empujones a las débiles, las han atacado a cornadas y las han hecho huir. 22 Pero yo voy a salvar a mis ovejas. No dejaré que las sigan robando. Voy a hacer justicia entre las ovejas. 23 Voy a hacer que vuelva mi siervo David, y lo pondré como único pastor, y él las cuidará. Él será su pastor. 24 Yo, el Señor, seré su Dios, y mi siervo David será su jefe. Yo, el Señor, he hablado. 25 Voy a hacer una alianza con ellas, para asegurarles una vida tranquila. Haré desaparecer las fieras del país, para que mis ovejas puedan vivir tranquilas en campo abierto y dormir en los bosques.
26 "Yo pondré a mis ovejas alrededor de mi monte santo, y las bendeciré; les enviaré lluvias de bendición en el tiempo oportuno. 27 Los árboles del campo darán su fruto, la tierra dará sus cosechas, y ellas vivirán tranquilas en su propia tierra. Cuando yo libere a mi pueblo de quienes lo han esclavizado, entonces reconocerán que yo soy el Señor. 28 Los pueblos extranjeros no volverán a apoderarse de ellos, ni las fieras volverán a devorarlos. Vivirán tranquilos, sin que nadie los asuste. 29 Les daré sembrados fértiles, y ellos no volverán a sufrir hambre ni las demás naciones volverán a burlarse de ellos. 30 Entonces reconocerán que yo, el Señor su Dios, estoy con ellos, y que Israel es mi pueblo. Yo, el Señor, lo afirmo. 31 Ustedes son mis ovejas, las ovejas de mi prado. Yo soy su Dios. Yo, el Señor, lo afirmo."
Mi Oración es:
Que tu que estas alejado de tu redil, tu que fuiste empujado fuera, seas restaurado a la gracia de Dios y fortalecido con su amor, para que luego podamos todos levantar verdaderas manos santas ante el Rey de reyes y Señor de Señores.

Gracias Dios

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