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1 Juan 4:16-21 (Dios Habla Hoy)
16 Así hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor, y el que vive en el amor, vive en Dios y Dios en él. 17 De esta manera se hace realidad el amor en nosotros, para que en el día del juicio tengamos confianza; porque nosotros somos en este mundo tal como es Jesucristo. 18 Donde hay amor no hay miedo. Al contrario, el amor perfecto echa fuera el miedo, pues el miedo supone el castigo. Por eso, si alguien tiene miedo, es que no ha llegado a amar perfectamente.
19 Nosotros amamos porque él nos amó primero. 20 Si alguno dice: "Yo amo a Dios", y al mismo tiempo odia a su hermano, es un mentiroso. Pues si uno no ama a su hermano, a quien ve, tampoco puede amar a Dios, a quien no ve. 21 Jesucristo nos ha dado este mandamiento: que el que ama a Dios, ame también a su hermano.
Parecería que el amor es un sentimiento poco practicado en estos tiempos, la generación en que vivimos insiste en enseñarnos que no es bueno admitir tus fallas, si las admites esto te haría débil y si lo haces tu vecino se mofara de ti y te tomara como tema de escarnio.
La iglesia esta siendo afectada por esta corriente del mundo. Puedo ver como ministros y servidores se mofan del hermano en su momento de debilidad o lo apartan, no les interesa, dicho comportamiento no viene de Dios, esa corriente viene del mundo a carcomer la comunicación. Así como Dios confundió al pueblo cuando construían la torre de Babel el diablo quiere confundirnos en estos tiempos, la comunicación se pierde es como una maldición, el miedo abunda y no quieres admitir que en Cristo eres fuerte y no por tus propias fuerzas.
Si tú eres cristiano y tienes algo contra tu hermano déjame informarte que no estas sirviendo a Dios como Él desea; tu corazón se ha contaminado con la cizaña del mundo.
Mas de una ves me he enardecido en contra de un hermano, sintiendo recelo por el o ella, despreciándolo, porque tampoco yo soy exenta, al contrario caigo una y otra ves. Entonces llevo mi sentimiento ante Jesús y le digo “toma esto, te lo dejo a ti” entonces Él hace el trabajo en mi, porque la carne es débil y destinada a perecer, ella desea cada minuto para deleitarse en sus frutos, pero si le das permiso a Cristo, El toma ese sentimiento y lo reemplaza con los frutos del Espíritu contra los cuales no hay ley.
“Sobre toda cosa guardada guarda tu corazón, porque de el mana la vida....”
Ten cuidado con las corrientes del mundo y no dejes que la cizaña crezca dentro de ti, arruinando tu relación con Cristo y tus hermanos, SINO TIENES AMOR, NADA ERES.
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